Vivimos en una sociedad capitalista, donde lo principal es consumir...
Muchas veces, no consumimos conscientemente. Consumimos, por capricho, porque queremos tener el último celular, o el último auto. O quizás tal vez, porque queremos algo que tiene un vecino nuestro, entonces nosotros lo queremos, sin más.
La cuestión a mi punto de vista radica en dos partes:
1. ¿LO NECESITAMOS?
Necesitamos ese último móvil que salió recién al mercado, o cambiar el auto por uno nuevo? O sólo es capricho por lucir las nuevas tendencias del mercado?
Las respuestas, pueden ser dos: puede ser que quizás sí lo necesitemos, para trabajar por ejemplo, que nos dé facilidades, comodidades y una mejor calidad a nuestro trabajo o puede ser que la respuesta sea que no lo necesitemos y que lo estamos adquiriendo sólo para lucir nuevas tendencias.
2. ¿PODEMOS ADQUIRIRLO?
La pregunta es, después de saber si lo necesitamos o no. Podemos adquirir dicho bien o servicio? Tenemos capacidad de pago para hacer frente?
Además cuál es la prioridad que tiene ese bien o servicio en nuestra lista de prioridades mensual?
Entonces...
Si nosotros evaluamos, y ponemos en la balanza tanto el si necesitamos el bien como si lo podemos pagar, vamos a estar analizando el NO caer en compras compulsivas e innecesarias, que nos van a llevar a deudas malas.
¿QUE SON LAS DEUDAS MALAS?
La deuda mala, es aquella en la cual el beneficio es por un período de tiempo corto, y luego la deuda continúa después del beneficio.
Ejemplos:
COMPRAS EXCESIVAS PARA LAS NAVIDADES.
COMPRAS IMPULSIVAS CON TARJETA DE CRÉDITO.
PRÉSTAMOS PARA VACACIONES.
COMPRAS INNECESARIAS.
Y AHORA BIEN... ¿LAS DEUDAS BUENAS?
Las deudas buenas son aquellas que te otorgan un beneficio a largo plazo, y que además están alineadas con tus objetivos financieros.
Ejemplos:
ADQUISICIÓN DE CRÉDITO HIPOTECARIO (Aclaración, tanto casa como auto NO SON ACTIVOS).
TOMA DE CRÉDITO PARA COMPRA DEL AUTO.
ADQUIRIR UN PRÉSTAMO PARA EDUCACIÓN.
PRÉSTAMOS PARA NEGOCIOS.
Ser organizado con tus finanzas, con tus gastos e ingresos es lo que te permitirá salir de las deudas. No se tiene que estar endeudado si no quiere, pero para esto se debe resignar consumo.